06 Dic MITOS Y REALIDADES SOBRE LAS CREMAS BEBÉS.
Según los estudios, se sabe que los bebés tiene la piel más final, por este motivo todavía no cumple su función de manera tan efectiva como la de un adulto.
La piel de un bebé se deshidrata con más rapidez que la de los adultos, por eso debemos hidratarla y cuidarla, con productos específicos para ellos, estos suelen producirse con productos naturales, aceites esenciales, de almendras dulces, de jojoba, cera de abeja, karité, y suelen ser muy efectivas tanto en adultos como en bebés y niños.
Las cremas que han tenido gran acogida por las familias para la hidratación de sus hijos se han ido renovando e innovando, llegando a ser grandes aliadas para todos los miembros de la familia.
Es importante saber que llevan estas cremas, la mayoría tienen principios activos que tiene propiedades antiinflamatorias y antisépticas, cicatrizan de maravilla y tienen muchos nutrientes en aceites naturales como carotenos y flavonoides, que ayudan a proteger la capa de grasa natural, necesaria para la barrera protectora de la piel.
La crema de los bebés tiene menos conservantes y ninguna fragancia, además de ser hipoalergénicas, y no obstruyen los poros, están exentas de parabenos. Son muy utilizadas para eczemas, rosáceas o psoriasis, para eliminar las bolsas debajo de los ojos, como desmaquillantes, o hidrante facial en adultos.
No hay mitos o leyendas en este tema, es necesario hidratar la piel de nuestro bebé desde que nace, primero para evitar la deshidratación, segundo para que no sienta picor cuando comienzan a cambiar la piel sobre todo la zona de los pies y manos. Los aceites de almendra dulce (por ejemplo) son grandes aliados para dar masajes a nuestros pequeños, a la vez que hidratamos y cuidamos de su piel.
Hay cremas específicas para tratamientos, como la dermatitis, rojeces en la zona del pañal, para quitar los granitos “engordaderas” de la carita, o eliminar la costra láctea, son de gran efectividad, solo tenemos que buscar la adecuada para cada uno.