El motivo por el que requerí de una salus a domicilio fue porque nosotros vivimos lejos de mi familia, todos ellos en Francia, y porque venían en camino ¡mellizos!
Ya desde el primer contacto con Ana, mi salus, recibí una gratificante sensación de paz que no me ha abandonado hasta la fecha. Me transmitió mucha ternura y sabiduría, llegamos a tener una relación estupenda. Ha sido como una hermana para mí en este periodo tan especial de mi vida, nunca lo olvidaré, le estaré eternamente agradecida.
Ana, mi salus, ha sido como una hermana para mí en este periodo tan especial de mi vida, nunca lo olvidaré, le estaré eternamente agradecida.
El personal que tiene Babysalus es genial; cariñosas, simpáticas y con mucha experiencia. Ellas me han proporcionado muchos y útiles conocimientos, descanso, sosiego, paz… Siempre ha sido fundamental saber que mis niños estaban a cargo de una cualificada y bellísima persona.
Mi salus me asesoró y apoyó mucho en esta etapa plagada de duros y difíciles momentos , sobre todo al principio, cuando todo se hacía más complicado por la falta de experiencia y por los miles de miedos y dudas que te asaltaban sin cesar.
Contraté el servicio durante 2 meses, 4 días entresemana, y luego 2 noches alternas durante otros dos 2 meses más, en horario nocturno de 22:00 a 08:00. A veces lo compaginaba con días de servicio diurno.
Si os los pudierais permitir, yo recomendaría un horario más extendido, por ejemplo de 21:00 a 09:00.
Ha sido magnífico, me fascina el grado de compromiso por parte de todo el equipo, tanto de las salus como de sus responsables, Magdalena e Isabel, todas ellas con una absoluta preocupación y profesionalidad porque todo aconteciera de la mejor forma posible. Superatentas en todos los aspectos.
