
Cómo Estimular el Desarrollo Motor en Niños Pequeños
15 Jul
El desarrollo motor en los niños pequeños es fundamental para su crecimiento físico, cognitivo y emocional. A través del movimiento, los niños descubren el mundo, mejoran su coordinación y adquieren confianza en sus habilidades. Estimular este desarrollo desde los primeros meses de vida contribuye a su autonomía y bienestar.
¿Qué es el desarrollo motor?
El desarrollo motor se refiere a la evolución de las habilidades físicas que permiten al niño moverse y controlar su cuerpo. Se divide en dos tipos principales:
- Desarrollo motor grueso: movimientos amplios que involucran brazos, piernas y torso (gatear, caminar, correr, saltar).
- Desarrollo motor fino: movimientos más precisos y coordinados, especialmente con manos y dedos (agarrar objetos, dibujar, abotonar ropa).
Etapas del desarrollo motor (0 a 3 años)
Aunque cada niño se desarrolla a su propio ritmo, existen ciertos hitos comunes:
- 0 a 6 meses: sostiene la cabeza, gira sobre sí mismo, alcanza objetos.
- 6 a 12 meses: se sienta solo, gatea, se pone de pie con apoyo.
- 12 a 24 meses: comienza a caminar, empuja juguetes con ruedas, lanza pelotas.
- 2 a 3 años: corre, sube escaleras, salta, comienza a usar lápices o cucharas con mayor precisión.
Estrategias para estimular el desarrollo motor
1. Proporciona un entorno seguro y libre
Permite que el niño explore su entorno sin restricciones innecesarias. Evita el uso excesivo de andadores, sillas o dispositivos que limiten el movimiento.
2. Juegos de suelo
El tiempo en el suelo (como el «tummy time» o tiempo boca abajo en bebés) es esencial para fortalecer los músculos del cuello, espalda y brazos.
3. Motiva el movimiento libre
Coloca juguetes a cierta distancia para animar al niño a alcanzarlos. Usa pelotas blandas, túneles o cojines para fomentar el gateo y el equilibrio.
4. Actividades para la motricidad fina
- Ofrece materiales como bloques, plastilina, hojas para rasgar o lápices gruesos.
- Anímalo a abotonar, encajar piezas, meter y sacar objetos de recipientes.
5. Canta, baila y juega
La música estimula el ritmo y la coordinación. Bailar, aplaudir o seguir canciones con gestos mejora la conciencia corporal.
6. Estimulación diaria en la rutina
Vestirse, comer solo, ayudar a guardar juguetes o lavarse las manos son oportunidades para desarrollar habilidades motoras en el día a día.
7. Evita la sobreprotección
Es importante dejar que el niño intente y se equivoque. Intervenir solo cuando sea necesario permite que gane confianza y autonomía.
¿Qué nos tiene que preocupar en el desarrollo motor? Señales de alerta:
Consulta con un pediatra si el niño:
- No sostiene la cabeza a los 3 meses.
- No se sienta solo a los 9 meses.
- No camina a los 18 meses.
- Muestra rigidez o flacidez muscular excesiva.
- Usa siempre un solo lado del cuerpo para moverse.